La Práctica

ZaZen

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Zen es zazen, la práctica. Consiste en sentarse con las piernas cruzadas, la espalda bien derecha y el mentón recogido. La respiración tranquila y profunda. El espíritu atento, despierto; siguiendo el ritmo respiratorio, vigilando el equilibrio justo de la postura y observando el fluir del pensamiento sin adherir ni rechazar. Además de los indudables beneficios para la salud, zazen aporta paz y libertad. Clarifica la mente, tonifica el cuerpo, armoniza pensamiento y acción. Zazen es simple y para practicarlo no es necesario ningún conocimiento especial o previo. Es un aprendizaje a través del silencio. Un retorno a la condición normal del cuerpo y el espíritu

Samu

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Es zazen en acción. Son los actos comunes de la vida cotidiana realizados desde una atenta y silenciosa concentración. El no-elegir, el realizar las tareas juntos y sin buscar un resultado, son sus características. Durante el Samu no hay rangos, privilegios ni excepciones y todos participan activamente. El trabajo es nuestra capacidad natural de expresarnos en este mundo. Realizado con un espíritu desprendido que no busca provecho, creamos orden en nuestro entorno, ayudamos a los otros y nos ayudamos a nosotros mismos. Es la mejor medicina para nuestra salud y el medio ambiente. Un modo simple y sencillo de armonizar cuerpo y mente.

Taiso

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No hay ningún momento de nuestra vida en la que el cuerpo no esté involucrado. No hay cuerpo sin espíritu ni espíritu sin cuerpo. Modificando nuestros hábitos corporales podemos cambiar nuestro espíritu. Podemos, a través de una práctica regular, paciente y metódica, corregir nuestra postura y nuestra actitud frente a la vida. Si bien el centro de nuestra práctica es zazen, en todos los templos de la Transmisión se acostumbra realizar –además del Samu como actividad corporal cotidiana- algún tipo de ejercicios físicos. Se realiza cotidianamente y en grupo. La continuidad es importante. La compañía de otras personas incentiva y crea una buena atmósfera. Las sesiones tienen una duración de entre 25 y 30 minutos y se desarrollan en completo silencio

ZaZen Kai

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Existen tres pilares para la práctica correcta de zazen: Postura, Respiración y Condición de la mente o espíritu, Postura: Colocar el zafu (almohadón) a aproximadamente un metro del muro. Sentarse y cruzar las piernas en loto o medio loto. En la posición de loto, colocar el pie izquierdo sobre el muslo derecho y el pie derecho sobre el muslo izquierdo. En medio loto, contentarse con presionar el pie izquierdo contra el muslo derecho. Balancear la pelvis hasta encontrar el justo equilibrio. Estirar bien la columna vertebral y recoger el mentón. Las manos con las palmas vueltas hacia arriba, la izquierda sobre la derecha y los pulgares en contacto. Los párpados entornados y la mirada baja. La lengua en contacto con el paladar, la boca cerrada y los dientes tocándose. Empujar el suelo con las rodillas y el cielo con la cabeza. Respiración: Durante zazen prestamos atención a la respiración. No hay que controlarla ni forzarla, sino permitir que el aire fluya libremente en una forma natural. Así, va encontrando su ritmo. Si se acompaña la exhalación hasta el final, esta se hace más profunda y la inspiración llega por sí misma. Condición de la mente: Casi todas las filosofías y religiones coinciden en la necesidad de una mente quieta, silenciosa. ¿Cómo hacer para aquietar la mente? No podemos. Cuanto más lo intentamos peor es. Es preferible dejarla libre, dejando pasar los pensamientos y concentrarse en la respiración. Si observamos el fluir del aire, la mente, en un instante, desaparece por sí sola. Dice el maestro Dogen: “Pensad desde el fondo del no-pensar.” ¿Cómo pensar desde el fondo del no-pensar? No pensar.

Dokusan

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Dokusan es una entrevista personal, un encuentro -espíritu a espíritu- de dos seres.

Zan Shin

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El gesto justo. El zen ha prestado siempre particular atención al comportamiento en el accionar cotidiano. Cómo caminar, cómo sentarse, cómo estar de pie, cómo acostarse. ¿Cuál es el rostro que presentamos ante los otros? La mirada, el gesto, ¿son verdaderos o falsos? Si somos sinceros, si estamos atentos entonces el más pequeño de nuestros actos adquiere una cualidad diferente. Dijo un maestro de la Transmisión: “Cuando estés solo, compórtate como si estuvieras frente a los otros. Cuando estés frente a los otros, compórtate como si estuvieses solo.”